miércoles, 3 de diciembre de 2008

Más listo que el hambre


Y es que el hambre y la miseria como maestras insustituibles en tiempos oscuros son el gran motivo narrativo del Lazarillo de Tormes (1554), casi sin duda la primera novela escrita en español.

Demasiado a menudo se ha tomado el supuesto realismo del Lazarillo a pies juntillas. Yo quiero hacer hincapié en que, a la hora de acercarnos a la obra, tenemos que apartar de la cabeza las ideas sobre lo verosímil y lo realista que podemos tener hoy. Del mismo modo que no se puede decir que los Reyes Católicos fueran "nazis" por expulsar a los judíos, o que Quevedo fuera un autor "machista" o que tuviera poesía "existencial", no es correcto llamar al Lazarillo una obra "realista". La premisa es: es imposible calificar un hecho anterior con términos que responden a una escala de valores posterior, ya que incurriremos en un anacronismo. Así, se suele poner como ejemplo de la terrible realidad social española la aparición de la novela picaresca. Quienes consideran que la novela picaresca constituye una especie de literatura de denuncia social están muy equivocados. Es imposible hablar de literatura de denuncia en el siglo XVI. Una cosa es que se aproveche una situación para inspirar una obra literaria, y otra muy distinta que se lean unos hechos ficticios en marco y circunstancias como si de auténticos documentos históricos se tratase.

¿Cuán "realista" es el Lazarillo? ¿Qué convierte una novela en realista? Desde luego, no es posible considerar realista el hambre del protagonista, que le hubiera llevado a la tumba en el primer mes de vida con el ciego, su primer amo; ni tampoco la voz narrativa, que confiere a un ser marginal unas habilísmas dotes literarias. La hipérbole domina toda la narración, y la intención primordial de la misma es mover a risa, sin apenas pretensiones de lo que estamos tentados a llamar "denuncia social". Los personajes destacados como amos de Lázaro son tipos sociales asimismo hiperbolizados, para escarnio de los mismos ante un público que conocía los modelos en que se inspiran. ¿Cuál es la auténtica "denuncia" del Lazarillo? Hacer comprender a los lectores que la falta de educación y de bienestar arrastra a los individuos a una degradación moral como la que experimenta Lázaro de Tormes a lo largo de la novela. Su peripecia, además de hacernos reír, nos enseña que quien mantiene a su pueblo hambriento será capaz de hacerle perder la dignidad y de relativizar hasta la destrucción su escala de valores, convirtiendo a cualquier hambriento al que saque mínimamente de la miseria en un estómago agradecido, en un títere indigno y temeroso tan sólo de no perder su recién ganada posición.

8 comentarios:

Didac Valmon dijo...

me gusta este análisis, me parece genial...
esto me recuerda que debería releerme el Guzmán de Alfarache, y otras tantas (entre ellas el asno de oro)

Ego... dijo...

Encierra más de lo que parece esa obra ¿eh? Como siempre me encantó tu análisis.
Besos

Anónimo dijo...

Me parece que sabes sacar perspectivas distintas de las opiniones generalizadas, eres una buena crítica.

Javier dijo...

creí que independizándome tendría más tiempo para bloguear y, sobre todo, para leer... pero nada más lejos de la realidad!!!

me cuesta dios y ayuda sentarme a escribir en mi blog, o simplemente a leer los de los bloggers cercanos. a ver si ahora que se acercan los reyes puedo pedirles que alarguen el día 6 horitas más!!!

sabes? tengo encargado el lazarillo, espero leérmelo en navidad!!! pero lo encargué antes de leerte el post, junto con la celestina!!!

un saludo, alicia!!!

Nepomuck dijo...

mmm... menudo follón,la chicha es acojonante.menos mal que me lo explicaste.me parece difícil pilla el fondo de las cosas, y yo lo hice con SIN CITY una serie de cómics muy simle,pero tardé casi una semana!y se ve que tú te has esforzado mucho más.

La sonrisa de Hiperion dijo...

A mi del Lazarillo, me quedo con la historia del alcón donde guardaba el queso... que grande!
Saludos

mertxy dijo...

NO SE PUEDE DISCUTIR ALICIA QUE DESMENUZAS CADA OBRA Y QUE SABES ENFOCARLA DE NUEVAS Y PRECISAS MANERAS...ME GUSTÓ MUCHO TU TRABAJO...AYS LO QUE HACE LA MISERIA Y EL HAMBRE!
MIL BESITOS DE AGUA
MERCHY

LOLA dijo...

Hola Alicia!! Acabo de entrar por casualidad en esta reseña de el "Lazarillo de Tormes" y no puedo dejar de dar mi opinión. El "Lazarillo de Tormes" no es casualemente una obra anónima, el autor sin duda ocultó su nombre escapando de las poderosas garras implacables de la Inquisición de la época. Así lo demuestra la edición encontrada en 1992 oculta entre los muros de una casa de Barcarrota (Extremadura)junto a otros títulos censurados en la época. La cuastión que debemos plantearnos es por qué un libro tan breve y, en ocasiones cómico, fue perseguido en la época. Más allá de un breve e hiperbólico repaso de los tipos de la época, hay una denuncia anticlerical hacia el abusos sexuales que la clerecía de la época profesaba con niños ( uno sus primeros amos intentará tener relaciones con Lázaro, pero este huye despavorido)y barraganas ( a costa de que su esposa sea la barragana del religioso que da su primer oficio remunerado, Lázaro consigue estabilizarse económicamente al final de la novela). El Lazarillo es la denuncia del hambre y la dejación más absoluta a en la que se ven la mayoría de los españoles en la época de mayor explendor político, la conquista del Nuevo Mundo. Una voz poderosa y anónima que se atrevión de denunciar la intrahistoria del Imperio Español y convertir a un pobre muerto de hambre en el protagonista de una de las novelas más hermosas que se han escrito.