miércoles, 11 de febrero de 2009

El mal poema


A la hora de estudiar un movimiento o corriente literaria, debemos tener en cuenta que, si bien casi todos ellos pueden esquematizarse en algunos rasgos característicos, aunque sea grosso modo, todos son deudores de la tradición anterior, ya que sería absurdo pensar que un poeta o novelista o dramaturgo al escribir su obra no tiene asimilado el corpus literario precedente, el contexto cultural en que se formó. No obstante, uno de los rasgos que, a mi modo de ver, hacen del Modernismo un movimiento especial, si se quiere, en su concepción, es el que define su carácter de superación de otro movimiento en vías de agotarse. No pocos críticos han señalado que las corrientes literarias parecen moverse a impulsos cíclicos, de manera que un movimiento cualquiera surge como reacción a los planteamientos de otro que inmediatamente lo precede. No obstante, el Modernismo surge como un movimiento de superación del Romanticismo, ya que no reacciona contra sus planteamientos, sino que agota los cauces de su expresión, se sirve de sus imágenes, bebe de sus conceptos y símbolos (el tiempo que huye, la melancolía y la tristeza como estados del alma, el lamento resignado, la vivencia onírica, escapista y oriental, el gusto por lo popular y el paisaje extraño...).
Mi debilidad por el Modernismo me lleva a traer hoy a La Letraherida los fantásticos libros de Manuel Machado Alma, Caprichos, El mal poema; reunidos por Castalia en un solo volumen. Alma explora un mundo interior a menudo lleno de pesimismo existencial. La nueva sensibilidad procede directamente del último lirismo intimista de Bécquer, que constituye de esta manera un eslabón hacia el Modernismo. Por otro lado, la defensa de la aristocracia estética y la libertad son las grandes bases de esta nueva sensibilidad, así como la defensa de la imagen torremarfileña como reducto de aislamiento. El poeta está encerrado en un mundo preciosista y exquisito, el mundo de sus propias ideas, al que es difícil acceder y que lo mantiene desconectado de la realidad, generalmente más cruda y prosaica. El agotamiento de los símbolos románticos lleva a Machado, en El mal poema, a escribir unos versos pícaros, canallescos, insultantes, fascinados por lo sórdido y lo feo, las amadas son prostitutas y bailarinas, la mayor diversión es la bebida, el mejor ambiente es el de la noche. El poeta se vuelve descarado, chulo y castigador.
Un libro perfecto para ir conociendo y disfrutando a un poeta tan olvidado, tan eclipsado por la figura de su hermano, al que es de justicia colocar ya en el lugar que le corresponde en la Literatura.

"Y mañana
hablaremos de otra cosa

más hermosa
si la hay,
y si me da la gana."
La foto es mía

8 comentarios:

Arwen Anne dijo...

una entrada llena de verdad y de realidad pura, me ha encantado y me he encantado verte de nuevo escribiendo en el blog, gracias por volver, se te echaba de menos

besos

TitoCarlos dijo...

No sé si llegaré a pertenecer a algún movimiento literario o si ya pertenezco y no lo sé. Soy neófito, independiente, no he ido nunca a cursos de escritura, solo leo; leo un montón. Y no sé de quien tomo influencias. Tagore diría que soy más esponja que se empapa que río que fluye, y digo yo que lo manifestaré en mis escritos... algún día.
Me gusta el post. Una lección más.

Didac Valmon dijo...

Fantástica entrada sobre un gran desconocido, y un hermoso libro de tres!
Qué ganas tengo de compartir la facult otra vez

Critter Venudo dijo...

Me ha gustado el post, es muy interesante. Se nota que te gustan las letras, ya me explico tu dedicación a la filología.
Un placer haberte descubierto. Saludos, también te pongo link.

Javier dijo...

Hacía tiempo que no pasaba por aquí!! Me alegra ver que sigues con posts tan interesantes como siempre!! El modernismo aún no ha llamado a mi puerta de la curiosidad, pero seguro que termina por hacerlo en algún momento: lo bueno de tu blog es que haces que la gente se interese por lo que comentas. Espero conseguir eso algún día!

Un saludo, AliciA!

Arc dijo...

Y pensar que he tenido ese libro en mi estanteria y no lo he leido, espero que me lo vuelvas a dejar.

mertxy dijo...

y mañana hablaremos si nos da la gana...jejej
me encantó este post y como desmenuzas el sentir y dejas traspasar el mensaje...oye que me alegra mucho volver a verte cielo
mil besitos de agua
merchy

Álvaro Guijarro dijo...

Buena crónica. Por suerte a Manuel cada día que pasa se le va dando algo más de espacio, no sé bien si por cuánto le gusta a Sabina y a ciertas bandas de rock o por el brillo y color de su poesía, alejada de la oscuridad de tantos otros.
Escribe con más asiduidad, lo haces bien.
Un saludo,
Álvaro.